Mandarse una cagada

  • Es sinónimo de hacer un desastre o cometer un error épico, generalmente con resultados cómicamente desastrosos.

    "Che, anoche me mandé una cagada tremenda: le dije a mi suegra que su salsa no tenía ni gusto a nada."

  • Expresión usada para describir cuando alguien comete un error garrafal que deja huella, usualmente con consecuencias imprevistas.

    "Che, Juan se mandó una cagada bárbara: quiso impresionar a la chica nueva y terminó confundiendo su nombre. ¡Qué papelón!"

  • Cometer un error grave o hacer algo muy inapropiado.

    "Me mandé una cagada en la reunión, dije cualquier cosa y todos se quedaron mirándome raro."

  • Expresión para referirse a hacer algo mal o cometer un error colosal, generalmente con consecuencias desastrosas. Se usa cuando alguien mete la pata de forma épica.

    "Después de dejar el auto sin freno en bajada y verlo meterse en la zanja, fue evidente que el Tito se mandó una cagada."

  • Expresión usada para referirse a alguien que metió la pata monumentalmente, un error de esos que te dejan pensando en por qué saliste de la cama ese día.

    "Juanito se mandó una cagada al tratar de hacer un asado y quemar hasta las parrillas. Imaginate el olor."

  • Usado cuando intentas impresionar y terminas dejando un caos que ni el mejor orador puede excusar. Es una invitación sin querer al club del desastre comprometido.

    "Íbamos geniales con la presentación, hasta que Pepe se mandó una cagada iniciando los fuegos artificiales antes de tiempo; parecíamos en Nochevieja."

  • Desplegar una cadena desopilante de eventos desafortunados que comienzan con un despiste ingenuo y culminan en una catástrofe digna de contar en reuniones familiares.

    "Estábamos preparando la calçotada, cuando Marta se mandó una cagada: ponía salsa por todo menos por los calçots. Acabamos comiendo pan sucat metido en crema."

  • Lovecraftianises a mundane task into an epic mistake explosion, blending ordinary mishaps with hints of untamed chaos, making you the unwitting protagonist of your own misfortunes.

    "Lo que iba a ser una simple revisión del coche se convirtió en mandarse una cagada al poner gasoil en vez de lavaparabrisas; la Necronomicón Automovilística está nivelación difícil."

  • Cuando lanzas una idea brillante en el papel, pero durante la ejecución se transforma en un absoluto lío que no hay cola termofusible que arregle. Terminas detenido en pie de guerra contra la lógica misma.

    "No te cuento la mascletà que fue cuando Paco se mandó una cagada al inaugurar el cercano a inaugurar Centro de Tortillas y abrió con paella sin arroz; aún estamos recogiendo cabos sueltos."

  • Realizar un intento de salvar una situación que inevitablemente termina como el Titanic del caos, hundiéndose mientras escuchas de fondo música épica y te aferras al mástil de la esperanza.

    "Estaba intentando reparar la lámpara antes de la visita de mis suegros, pero me mandé tal cagada que ahora tengo iluminación estroboscópica en todo el salón. Parece una discoteca ye-ye."