Que te vaya bonito
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Despedida cordial deseando que todo vaya bien.
"Nos vemos, que te vaya bonito en tu viaje."
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Usada entre coleguillas en la feria para despedirse de alguien que ya lleva rebujito hasta en el calcetín y buscas que no te las líe en su zaga.
"Ya con el cachondeo en tope, me puse las gafas carnavaleras y solté un "que te vaya bonito" al ver a Paco bailando sevillanas con una farola."
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Despedida que usas en el mercado cuando quieres librarte del justificante de la cola que lleva siglos intentando explicarle sus problemas al frutero.
"Le contesté con un "que te vaya bonito" acelerado después de haberle aguantado sus historias sobre melones asturianos toda la tarde."
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Expresión usada cuando te cruzas con alguien un poco mosca, sabiendo que justo va a entrar al parking secreto de la ciudad: los atascos perennes.
"Juan, después de sacarle veinte uñas del expediente a su jefe, le soltó un irónico "que te vaya bonito" mientras veía cómo se le cerraba la puerta del atasco en pleno centro."
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Lo dices cuando despides a alguien e inesperadamente te transforma en guía turístico, deseando que se pierda por todas las rotondas de la isla, porque todos son muy majetes pidiendo direcciones.
"Después de media hora explicándole a Pepe cómo llegar a Soller, le desee un "que te vaya bonito" y realicé una cabriola mientras seguía explicándole lo del ferry a Menorca."
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Forma sarcástica de despedirte de ese familiar que siempre embellece sus logros y deja la sobremesa más agitada que el encierro de los Sanfermines.
"Mi primo, después de detallar a todo volumen cómo ganó al mus usando telepatía, me guiñó un ojo mientras yo le decía "que te vaya bonito" entre sorbos de clarete."
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Expresión irónica para despedirse de alguien cuando en realidad querías verle caer del taburete.
"Después de haberme pisado toda la charla, me despedí con un sonoro "que te vaya bonito" y un adiós muy buenas."
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Una despedida color de rosa, ideal para darle dramatismo a una salida elegante o simplemente porque te sientes en telenovela.
"Después de un adiós digno del Oscar con música de violines, Sofía cerró la puerta y me lanzó un último "que te vaya bonito"."
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Expresión que se usa cuando despides a alguien y sabes que la lía tanto que más le vale buscar escapatoria en otro planeta, no sea que monte el pollo.
"Le dije a Manolo "que te vaya bonito" tras ver cómo intentaba encender una barbacoa con dinamita y darnos un espectáculo de fuegos artificiales improvisado."
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Frecuentemente dicho entre amigos after de un épico asado mientras juegan a despedirse, conscientes que el reencontrarse es cuestión de horas y más empanadas.
"Después de devorar el último matambre, Luis me dio un abrazo y me soltó un "que te vaya bonito" antes de ofrecerme otro mate para la vuelta a la pieza."