Usado para llamar la atención de alguien o expresar sorpresa, algo así como decir "oye" o "vaya" con un toque cántabro.
¡Chacho! No me digas que te comiste toda la soba sin dejarme ni una miga.
Un regaño épico al mejor estilo santandereano, normalmente cargado de sarcasmo y sin pelos en la lengua.
Cuando llegué a casa tarde, mi mamá me dio tal lenguazo que hasta el perro se escondió.
Es el arte de vestirse con tantas capas de ropa que parece que llevas encima un edredón y estás listo para una siesta al aire libre.
Juanito, deja de empillowarte tanto, que parece que vas a la guerra del frío.
Expresión que se utiliza para describir a una persona que está completamente agotada o desaliñada, como si la hubieran molido. Derivado del cuchuco, una sopa de maíz quebrado típica de la región.
Después de esa caminata por el cañón Chiqueros, quedé hecho un cuchuco, ni ganas de levantarme tengo.
Expresión santandereana que indica que alguien tiene mucho dinero, como si estuviera literalmente cubierto de billetes.
Desde que ganó la lotería, Pedrito anda más creído porque está forrado.
Reunión informal que termina en fiesta improvisada, donde cada quien trae lo que pueda para añadir al despeluque.
El sábado montamos un juntamiento en la terraza y terminamos bailando hasta el amanecer.
En Santander, 'parlar' no es solo hablar, ¡es armar una berraquera de protesta! Es como cuando alguien empieza a cuestionar tanto que sientes que te están haciendo un interrogatorio.
Uy, cuando mi tía empieza a parlar se pone peor que inspector de policía. El otro día armó tremendo parlazo porque la sopa estaba tibia.
Dícese del joven inexperto y algo arrogante que va de sobrado, pero apenas sabe lo suficiente para atarse los zapatos.
No le hagas caso al nuevo, ese lechuguino cree que nos va a enseñar macramé en clase de historia.
Se utiliza para describir a alguien que está despistado o que parece estar en las nubes, con la mente en otra parte.
¡No le hagas caso a Juan! Hoy anda con cabeza de chupa y se le olvidó hasta cómo hacer un huevo frito.
Frase usada para referirse a alguien que está perdido, distraído o fuera de contexto, como si anduviera por el quinto pino.
Le pregunté a Javier sobre la reunión y estaba en las quinientas, ¡ni se enteró de lo que le dije!
Es una palabrita polivalente en Santander. Puede referirse a alguien que se da ínfulas o actúa de manera ostentosa, como si tuviera más de lo que realmente tiene.
Mira a ese man con su carro alquilado, sí todo 'aguaje' y luego no tiene ni para el tinto.
Se usa para describir cuando algo no sale como esperabas porque alguien metió la pata o hizo las cosas peor de lo que estaban. Viene del hecho de 'hacerlo más puerco' en lugar de arreglarlo.
Le dije a Juan que me ayudara con la tarea y en vez de eso, terminó empuercándola peor.
Expresión usada para describir a alguien que no puede parar de reír, casi como si estuviera borracho de alegría. En Santander, 'chiflis' se refiere a una especie de embobamiento feliz.
Cuando Jorge contó su historia del río, todos empezamos a reírnos como un chiflis hasta que nos dolió el estómago.
Expresión usada para describir a alguien que se ha perfumado tanto que deja su rastro olfativo por donde pasa, como si llevara una capa de aroma lista para la batalla.
No me digas que viene Gerardo... ¡esto huele a guerra y aún no lo he visto aparecer!
Forma santandereana de decir que algo está muy complicado o casi imposible, como cuando intentas convencer al profesor de que no deje tarea.
María, ir a la playa este fin de semana está ferrote, tengo un montón de exámenes.
Expresión santandereana que se utiliza para expresar sorpresa o incredulidad ante lo que alguien acaba de contar. Implica una mezcla entre '¿en serio?' y el clásico '¿qué me dices?'. ¡Es perfecta para esos cuentos largos e inverosímiles!
"Mano, vi a Carlos volviendo con la ex... – ¿Dónde, ome? No joda, ese tipo nunca aprende."
En Santander, 'realzar' no es solo embellecer lo que ya estaba bonito. Aquí se trata de ponerle ese toque magistral a todo lo que merece una segunda ronda: sopa aguada, cumpleaños ochenteros, chismes del pueblo... todo se puede realzar.
Vamos a realzar la fiesta de este sábado con unos buenos pasabocas y música santandereana para mover el esqueleto.
Se dice de alguien que actúa con aires de grandeza y nobleza, pero sus modales dejan mucho que desear, como un marqués venido a menos.
Mira al Juancho, se las da de importante en el club, pero no paga ni la ronda... es un vil marquesito.
Expresión usada para referirse a cuando una persona intenta caerle bien o endulzar el oído de un superior, muchas veces con fines algo interesados.
Ahí va Pedro otra vez a jalarle mecate al jefe, a ver si le suben el sueldo.
En Santander, esta es la sabrosa y divertida costumbre de merendar algo rico a media tarde. Es como si tu barriga y tus papilas gustativas se fueran de fiesta en pleno día.
Después del paseo por la montaña, vamos a echarnos las onces con unas arepitas calientes.
Expresión para decir que algo es realmente genial, bonito o espectacular en esta querida región colombiana.
¿Viste el mural nuevo en el centro? ¡Qué vaina tan bacana, chico!
Expresión usada para referirse a cuando alguien se queda dormido repentinamente, especialmente después de comer demasiado o estar llevando una vida relajada.
Después del almuerzo en la finca, todos terminamos haciendo la ciruela bajo el almendro.
Cuando quieres ‘sacar algo extra’ en cualquier trato o situación, así como el cuentico que te haces para convencer a alguien de que te den más.
¡Esa arepa está muy buena! A ver si le saco la ñapa al vendedor con una sonrisita.
Usado cuando alguien se va de madre, es decir, que exagera o hace algo completamente fuera de lugar.
No te zarpes y devuélveme el libro que te presté, ya van tres meses y parece que navegó al otro lado del mundo.
Expresión que se usa cuando alguien cambia de tema o discurso abruptamente, dejando a los demás con cara de '¿y eso qué tiene que ver?'
Estábamos hablando de fútbol y de repente Juan salió con el clima. Ese man siempre hace un giro inesperado.
Expresión coloquial para referirse a alguien que está perdiendo el tiempo o soñando despierto en lugar de estar haciendo algo productivo.
¡Deja de tomar la leche y ponte a estudiar, que el examen es mañana!