Expresión que usan los boyacenses para describir un quejido exagerado o llanto fingido; como llorar sin tener una buena razón, generalmente para llamar la atención.
¡Deje de llorar en el páramo, Primo! Si eso no duele tanto.
En Boyacá, decir que alguien tiene una 'vuelta' no significa que vaya a dar un paseo en bicicleta. Se trata de cualquier asunto o compromiso pendiente por resolver; desde comprar pan hasta cruzar palabras con la suegra.
No puedo salir a tomar pola porque tengo una vuelta con mi mamá: toca hacer mercado.
Expresión boyacense para describir algo aburrido o sin emoción, más plano que la cordillera central.
La fiesta anoche estuvo rete-tabla, al final nos fuimos a zampar un mute en la tienda.
No es solo el postre, en Boyacá 'dulce de leche' se usa para describir a alguien que es tan amable y simpático que dan ganas de abrazarlo.
Ese Andrés es un dulce de leche, siempre ayudando a todo el mundo con una sonrisa.
Exclamación usada para saludar a alguien cuando llegas de improvisto y quieres ver si hay alguien en casa, muy útil si estás pensando echar un cafecito.
Llegué a la finca de mi tía y grité '¡Upe!' desde la puerta para que supieran que venía por puro amasijo.
Frase utilizada para referirse a alguien que está distraído o perdido, como quien busca lechugas donde no las hay.
Juanito, ¿estás en las lechugas o qué? ¡Te estoy hablando y ni me pelas!
Dicen que una persona es berrionda cuando tiene un carácter fuerte, decidido y no se deja de nadie. ¡Cuidado con meterse con un boyacense berriondo!
Esa muchacha sí que es berrionda, negoció un mejor precio porque no se dejó meter los dedos en la boca.
No, no es alguien de Asia, en Boyacá 'chino' es la manera coloquial y cariñosa de referirse a un niño o joven. ¡Ahí le ponen emoción al asunto!
Vea pues al chino de don Luis, ya está corriendo por toda la vereda como si fueran las olimpiadas.
Expresión boyacense que significa pensar detenidamente sobre algo o darle muchas vueltas a un asunto en la cabeza.
Mi tia se la pasa cacharreando el coco porque no sabe qué le va a regalar al novio.
Acción de pasear o caminar sin rumbo fijo, generalmente disfrutando del paisaje rural y la tranquilidad boyacense.
Íbamos a maletiar por las montañas, pero nos detuvimos tanto a ver vacas que se nos hizo de noche.
Grupo de amigos inseparables que siempre están juntos, como gallos en un gallinero.
El fin de semana nos vamos a la finca con toda la gallada a hacer sancocho.
En Boyacá, 'empapelar' es una forma humorística de referirse a hablar mucho, especialmente cuando alguien está echando un cuento largo y tendido sin llegar al punto.
¡Ay hermana! Anoche el Juanito me empapeló con las historias del pueblo que hasta se me durmió la pierna.
Expresión usada para brindar con aguardiente, invocando una especie de bendición más fuerte que la mismísima agua panela. Se utiliza en cualquier ocasión festiva (o no) donde haya un pretexto para celebrar.
Llegó Juanito al asado: '¡Salud, mijo!' y con cada trago subía más el ánimo del combo.
Expresión utilizada para calificar positivamente algo que es realmente impresionante o sorprendente, como cuando ves algo increíble y solo puedes decir: ¡Guau! En lugar de 'urbano', en Boyacá dirías: esa sí es la mula.
¿Viste el concierto de anoche en la plaza? ¡Esa sí es la mula, parcerito!
Expresión simpática usada para referirse a que alguien joven es quien tiene que asumir las tareas o responsabilidades en ese momento.
¿Quién lava los platos hoy? Pues diría mamá que está de turno el guámbito, así que pilas, Miguelito.
Acción de presumir descaradamente algún logro, habilidad o premio, generalmente sobredimensionándolo hasta el infinito y más allá.
Desde que ganó la partida de parqués, no ha parado de medallar como si fuera campeón olímpico.
Cuando alguien está más perdido que un burro en una tienda, despistado, como si estuviera entretenido con las luces y el bullicio de una feria.
Le pregunté al Juan por el examen, pero él estaba en la feria, ni se acordó que había tarea.
Término boyacense para referirse con cariño o vacile a los niños, esos pequeños terremotos que andan de aquí para allá.
Ese guaricho anda corriendo por toda la plaza como si le hubieran dado café doble.
Frase coloquial usada para describir cuando alguien está hablando cosas sin mucho sentido, inventando historias o simplemente charlando de manera innecesaria.
Deja de hablar tanta carreta y ponte a estudiar, que así no vas a pasar el examen.
Acción de echarse una siesta tan profunda que ni un terremoto te despierta, común después de almorzar pesado.
Después del ajiaco, se fue a calar café y durmió toda la tarde como un bendito.
Se usa para referirse a una persona joven, fresquita y con energía pa' quemar (como el clima de Boyacá). No importa si eres chico o chica, chicorita es unisex.
¡Mire esa chicorita cómo baila en la fiesta del pueblo!
Usan esta expresión para referirse a algo que está en perfecto estado o alguien que siempre actúa de la misma manera, como por ejemplo, una abuelita bien estricta con el régimen de comidas.
Esa nevera es un guámbito, lleva treinta años funcionando como nueva.