Forma coloquial de referirse a una tarea o situación complicada que se supone fácil.
¡Vaya perrusco que es cambiar una bombilla en este trasto de lámpara antigua!
Expresión usada para referirse a algo increíble, fabuloso o impresionante. Nada que ver con un vaso de leche.
El concierto de anoche fue la leche, la Plaza Mayor estaba a tope.
Expresión de cariño e ironía hacia alguien torpe, pero con corazón de oro. Porque ser un 'cacho chorizo' es casi un arte.
¡Pero bueno, Paco, eres un cacho chorizo! Te dejaste el coche abierto toda la noche.
Un término cariñoso para referirse a alguien que anda un poco despistado o hace tonterías, pero sin malicia.
¡Pero mira qué tontucio eres, te has dejado el bocata en casa otra vez!
Expresión usada para referirse a alguien que vive sin preocupaciones, como si el universo fuera su mejor aliado.
Juan siempre está a la ventura; ayer perdió las llaves de casa y al rato vino el viento y se las trajo de vuelta.
Forma coloquial de referirse al trabajo, ese noble arte que te paga el cocido maragato y te deja planchado como una estaca en cuanto llegas a casa.
Hoy el currele estaba más duro que un chorizo zamorano pasado por agua.
Usada para describir a alguien que está un poco ido o loquito, pero en el sentido más divertido. Esa persona que está tan felizmente chiflada que puede inquietar un poquito.
¡Mira al Juan! Se ha subido al escenario a cantar con el grupo y ni siquiera se sabe la letra... Está como un cencerro.
Expresión utilizada para indicar que hay que ir rápido o hacer algo con intensidad. Como cuando tu abuela te decía que le metieras castaña al ritmo si querías llegar a la misa de doce sin que te pillara el cura.
¡Vamos, mételo en quinta y mete castaña, que llegamos tarde a la fiesta del pueblo!
Expresión que describes a alguien que está muy cansado, generalmente después de un día intenso o cuando no logra concentrarse por tantas distracciones.
Después de escuchar tanto jaleo en el bar, tengo la cabecita como un bombo. ¡Ni me hables!
Expresión que se usa para indicar a alguien que está hirviendo de enojo hasta el punto que parecería estar soltando vapor, igual que un viejo botijo al sol. Vamos, un mosqueo apoteósico.
Cuando le dijeron que tenía que trabajar el domingo, empezó a joder como un botijo.
Expresión para describir a alguien que está completamente desorientado, sin tener ni idea de lo que pasa a su alrededor.
Cuando mi primo empezó la universidad, estaba más perdido que un piojo en un hospital. No sabía ni dónde quedaba la cafetería.
Expresión utilizada cuando alguien parece destrozado, ya sea física o anímicamente, como si hubiera pasado por una tormenta intensa.
Después de la noche que tuvimos en las fiestas del pueblo, estoy hecho un cisco; ¡no consigo ni encontrar las zapatillas!
Se dice de alguien o algo que ha cruzado el límite, ya sea con sus acciones o palabras, al punto de resultar excesivo o hasta cómico. La típica metedura de pata 'quijotesca' pero castellanoleonesa.
Le dije a Juan que se dejara de tantas fiestas, ¡y va y se burla con un cotillón en casa! Este tío está pasao de rosca.
Esto no se refiere a un corte ni al río Tajo, sino a desayunar algo contundente para empezar el día con energía. Es la manera charra de decir que te vas a poner morado antes de salir.
Antes de irme a currar al campo me meto un buen tajo entre pecho y espalda, no vaya a ser que desfallezca.
Expresión castiza que se utiliza para referirse a alguien aprovechado que siempre logra invitarse a sí mismo a beber sin pagar ni un duro.
Ahí viene Juan, el especialista en chupar de gratis, ¡sólo aparece cuando hay botellón montado!
Expresión usada para indicar que algo no tiene relevancia o importancia, es como cuando alguien decide tomarse las cosas a la ligera.
Tranquilo, hombre, ¡pasa la chanza! Que olvidaste el pan en el súper, tampoco se acaba el mundo.
Estado de máxima alarma cuando el corazón se te escapa por las orejas. Porque un susto aquí no es cualquier cosa, ¡es acojonante!
Después de ver la factura del gasoil, me he quedao acojonao.
Aplicar velocidad a una tarea o irse rápido de un sitio, como quienes encienden un cigarrillo con prisas.
Cuando la abuela sacó los polvorones, eché el chisquero antes de que me encasquetara alguno.
Expresión utilizada para halagar a una mujer, generalmente refiriéndose a su atractivo físico o su buen carácter. Es como decirle a alguien '¡vaya, pero qué estupenda estás!' con un toque castellano.
En la fiesta del pueblo, Juan le dijo a Carmen: 'Anda, que eres buena moza', y ella se sonrojó.
Expresión coloquial para describir cuando alguien gasta mucho dinero, especialmente en algo que podría ser un capricho o despilfarro. Es como decir que el presupuesto volcó por la borda.
Mira a Laura; el otro día tiró la banca comprándose esos zapatos de oro puro... ¡Vamos, menudo pastón!
Frase usada para referirse a probar algo, especialmente comida o bebida, pero también se usa cuando vas a intentar hacer algo por primera vez 'a ver qué tal sale'. En fin, ¡que nunca falte el espíritu aventurero!
Voy a echarme un tiento al cocido de mi abuela; dicen que resucita a un muerto.
Forma cariñosa de referirse a alguien querido, aunque en realidad solo quieras que te pase el mando a distancia.
Oye, amorcico, pásame el mando que no llego desde aquí, anda.
Dícese de un lugar o casa que está hecha una pena, tan abandonada que solo sus paredes sirven para guardar telarañas. Perfecta para organizar botellones clandestinos.
Nos juntamos en el chamizo del pueblo a contar historias de miedo hasta que se nos fue la luz.
Expresión que se usa para describir a alguien que está muy contento, casi tanto como una fiesta en un mesón con vino y música.
Desde que ganó la lotería, Juan anda más feliz que unas castañuelas por el pueblo.
Frase con sabor castellano que se refiere a vivir sin trabajar, aprovechándose de otros como un campeón del dolce far niente.
Desde que ganó la lotería, Ramón está a la sopa boba en casa de sus padres, ¡ni mueve un dedo el tío!
Expresión usada para referirse a alguien muy tacaño o agarrado, aludiendo a que solo come un sencillo bocadillo de chorizo para no gastar más.
Ese Manolo siempre va de 'bocata de chorizo', ni en su cumpleaños saca unas patatas fritas para compartir.
Un lío tremendo, tan complicado que parece que ni con GPS sales de ahí. Si alguien dice que está en un follón, mejor llevar bocata porque la cosa va pa' largo.
Macho, me he metido en un follón preparando la cena. La cocina es como una guerra medieval, solo faltan los dragones.
Acto de devorar comida como si no hubiera mañana. Muy típico en celebraciones donde las tapas nunca son suficientes.
Cuando vio el lechazo asado, se tapiñó todo sin dejar ni las migas.
Típica forma castellanoleonesa de decir que alguien está presumiendo o haciendo alarde de habilidades que tal vez no tiene.
Ahí tienes a Lorenzo, siempre va de listo en la partida de tute y luego no da una.
Forma divertida de decir que alguien se ha ido o escapado rápidamente, como si hubiera una emergencia por salvar.
Cuando le mencionaron el examen sorpresa, Juan se abrió las de Villadiego para no tener que enfrentarlo.
Frase que se usa para describir a alguien que está dando vueltas y no llega nunca a ningún lado, sea porque siempre habla de lo mismo o está más perdido que un pulpo en un garaje.
Macho, llevas toda la tarde hablando del partido del domingo y no te aclaras... ¡estás como una noria!
Expresión usada para referirse a alguien con mucho morro, sinvergüenza o descarado. Vamos, que tiene toda la cara del mundo.
Ese fulano viene con más jeta que espalda pidiendo prestados cien euros después de llevarme el bocata.
Expresión típica para describir a alguien que está fingiendo trabajar pero en realidad no da un palo al agua, como si estuviera cuidando vacas jugando a ser vaquero.
Juan se pasa toda la mañana haciendo el vaquero en la oficina, mientras los demás trabajamos de verdad.
Frase coloquial para describir a alguien que se está esforzando mucho, como tratar de sacar agua de una fuente inagotable.
Después de toda la semana jalando del botijo en la fábrica, Juan solo quiere un descanso el fin de semana.
Dícese de alguien que se muestra especialmente aburrido, serio o poco sociable, al igual que esos tostones (almendras garrapiñadas) olvidados del año pasado.
¡Venga, Paco! No te quedes sentado como siempre. Estás más rancio que un tostón de feria.
Palabra usada para referirse a una persona que desprende un aire tan añejo como el vino olvidado en la bodega del abuelo. Suele aplicarse a alguien anticuado o con ideas obsoletas.
Vaya ranciazo es tu vecino, todavía cree que enviar mensajes por paloma mensajera es lo último en tecnología.
Expresión utilizada para referirse a cuando alguien se echa una buena siesta, generalmente después de haber comido como si no hubiera un mañana.
Después del cocido maragato, me voy al sofá a echar un Miguelito que ni un ángel lo hace mejor.
Forma divertida de referirse a alguien que es un cotilla profesional, siempre está al tanto de la última tendencia o rumor del pueblo.
Te has enterado, Chiscarrajo ya sabe quién se casó en secreto en el pueblo.
Expresión que significa beber alcohol en cantidades nada moderadas, como si no hubiera un mañana.
El viernes salimos del curro y nos fuimos a zampar a tabas hasta las tantas.
Frase que significa estar en la gloria; como cuando estás sentado a la sombra comiendo un buen lechazo asado.
Con este vinito Ribera del Duero estoy de madre, oye. ¡Hasta se me olvida el frío de Castilla!
Expresión que se usa para describir a alguien que está rígido o tieso, físicamente o bien en su manera de actuar, casi como un tronco.
Déjale el balón a Luis, que cuando corre está como una tabla y la lía siempre.
Expresión usada para referirse a beber una cantidad considerable de vino, típico en tierras castellanas. Acabas tan cargado como un burro, pero ni te importa.
Ayer fui al pueblo y terminé montando un burro en la fiesta de San Isidro, ¡madre mía qué resaca!
Dícese de alguien o algo que se demora mucho para llegar a un destino o conclusión, especialmente si da rodeos innecesarios.
Pedro todavía no ha llegado al bar. Está dando más vueltas que un garbanzo en la boca un viejo.
Expresión utilizada cuando alguien te está aburriendo o molestando con su charla interminable. Básicamente, es un '¡déjame en paz!' disfrazado de anuncio de carnicería.
Oye, Juanito, que llevo todo el día escuchándote lo mismo... ¡no me comas la oreja y vámonos de cañas!
Significa estar despistado o hacer las cosas sin mucha concentración. Como si tu mente estuviera más pendiente de tocar la gaita que de lo que tienes enfrente.
Hoy Ramón estuvo todo el día diseñando a la gaita; no ha terminado ni un boceto decente.
Dícese de alguien que está increíblemente contento, como si le hubieran tocado la lotería pero sin gastar un euro. Las castañuelas siempre llevan el buen rollo en su sonido.
Después de encontrar una bolsita de torreznos olvidada en la alacena, Chema estaba más feliz que unas castañuelas.
Expresión que se usa para cuando alguien decide tomarse un descanso o escapada estratégica de las responsabilidades, usualmente académicas. Muy aplicable entre los universitarios.
En plena semana de exámenes, Alfonso decidió echarse un vete al bar del pueblo para despejar la mente.
Expresión utilizada para referirse a liarse con alguien después de una noche memorable, pero de la que poco te acuerdas al despertar.
Anoche salí a la fiesta del pueblo y creo que eché la olla con el primo de Juan. ¡Vaya señal más loca!