Forma cariñosa de referirse a alguien que se pone nervioso y se trae abajo como si viera un fantasma, quedándose pasmado cual cielo despejado antes de la tormenta.
¡No seas azulito cuando te pregunten por tu crush! Habla fuerte y sin miedo.
Apodo cariñoso y humorístico para referirse a alguien que se pone triste por cualquier cosa, inspirado en las aguas del Lago Titicaca. Casi siempre va acompañado de un intento de alegrarlo rápidamente.
No te pongas azulito porque se acabaron las papitas, vamos al mercado y compramos más.
Apodo cariñoso para referirse a ese amigo que siempre está volado y tranquilo, tan fresco como una mañana otoñal en las Sierras.
Ahí viene el Azulito de Juan con su termo de mate, listo para filosofar sobre la vida.
Una manera cariñosa y algo cómica de referirse a alguien que hace mucho alboroto o aspaviento por una tontería. Muy común entre amigos para bromear cuando alguien se pone dramático.
¡Uy, qué azulito te pusiste porque no quedaba tu bebida favorita! Relájate, compa.
Apodo cariñoso para referirse a alguien que se viste elegantemente, con un toque fresco como el cielo puneño.
Mira nomás al Juanito, hoy sí parece todo un azulito con ese traje.
Dícese del pescado perfecto para el sancocho playero, fresquito y barato lo encuentras en el mercado.
Vente pa' la playa, ya tengo listo el azulito pa'l sancocho con un santa teresa de fondo.