En Arequipa, 'achicar' es dejar de hacer algo por falta de valentía o cuando el miedo te quita las ganas.
Iba a invitarla a salir, pero vi que estaba con su grupo y achiqué como pavo en navidad.
En Extremadura, 'achicar' no es solo hacer algo más pequeño, sino también tener el valor suficiente para enfrentarse a situaciones complicadas.
Me pidieron que subiera a decir unas palabras en la boda y tuve que achicarme y hablar, aunque con los nervios casi me muero.