Expresión usada para describir una situación o momento tan raro o inesperado que te deja boquiabierto, como si estuvieras en otro universo.
Ayer en la fiesta, cuando se fue la luz y se prendieron las velas de colores, todo parecía un verdaderísimo efectopsicodelico.
Expresión usada para animar a alguien a que haga algo divertido o inusual, sin preocuparse demasiado por las consecuencias.
Tenemos toda la noche, así que ¡alócate! y pide ese karaoke de salsa.
En Moquegua, cuando 'encargas' algo es que haces un pedido especial al tío de la bodega antes de una fiesta. No vaya a ser que te quedes sin tu caja de cervezas.
Oye, flaco, encarga unas chelas pa’ la noche que se viene buena la juerga.
Expresión usada para referirse a estar completamente lleno de comida, como cuando no puedes comer ni un bocado más.
Después del almuerzo moqueguano en casa de mi abuela, estoy taypá; ya no me cabe ni un alfajor.
Usado para describir a alguien que anda medio despistado o distraído, como si le faltara un tantito de atención o chispa.
Ese José está más perdido que nunca, parece que le falta aceite.
Expresión que denota ir por la vida con actitudes de grandeza o dándose aires de importancia impropios, como si uno fuera el dueño de la ciudad.
Ahí viene Lupe, desde que se compró ese bolso que dice 'Gucci', anda pituca creyéndose la reina del carnaval moqueguano.
Apodo cariñoso que los moqueguanos usan para ese amigo que siempre tiene una anécdota colorida que contar en las reuniones, como si estuviera sacando notas de un 'tablero mágico'.
Ayer estábamos en la peña y llegó el Tablerito con su última historia de amor en el sierra.
Frase utilizada para describir a alguien que siempre está tarde y busca cualquier excusa o acomodo para justificarse.
Llegó una hora después y me salió con que estaba 'acomoda'o como mandil de moza' por el tráfico.
Aunque en otros lados es un osito, en Moquegua le decimos así al novato del grupo, ese que siempre mete la pata o no entiende nada de nada.
¡Ay, ese Julio es un verdadero osezno! Le pedí una horneada de pastel y terminó quemando el arroz.
Dícese de una persona que está completamente llena y satisfecha después de una comida, como si le hubieran metido con embudo todo un banquete moqueguano. El término viene como derivado masticable de estar 'ahíto'.
Después del almuerzo en lo de mi tía Juanita, todos quedamos bien ahítaos; ya no nos entraba ni el postre.
Expresión que significa escabullirse o hacer malabares para conseguir algo sin ser notado.
Cuando el jefe llegó, Pedro ya había hecho la moche con el último pastel de choclo.
Cuando alguien corta el acceso de otra persona a un chisme caliente, es como si pusiera una tapa al entretenimiento del día.
¡No seas así! Iba a contarle todo lo que pasó en la reunión y tú vienes a tapar canchita.
Expresión utilizada cuando alguien está teniendo mala suerte o todo le sale mal, como si la vida decidiera darle unos buenos golpes, cual fruto olvidado en el mercado.
Ayer se le cayó el celular al agua y hoy pisó chicle. Definitivamente está piña.
Llamar 'taita' a tu papá no es solo una forma de decirle 'papá', es decirle al mundo que tu viejo es el capo, el maestro de maestros.
Oye, mi taita sabe más de ferias que nadie en Moquegua.
Expresión usada para describir a alguien que se mete en problemas ajenos tratando de ayudar, pero termina siendo parte del problema.
Ese Freddy siempre se trepa el muro y al final no arregla nada, solo lo complica más.
Se dice de alguien que actúa con total tranquilidad y desparpajo, incluso en situaciones donde la mayoría estaría nerviosa.
Después del examen más difícil del semestre, Pedro estaba más fresco que lechuga moqueguana mientras todos los demás lloraban sus malas notas.
Ir a Tacna, pero no precisamente para pasear... ¡sino para regresar con maletas llenas hasta el tope como si hubieras ganado un bingo!
Este fin de semana nos vamos a tacnear para traer cosas ricas y baratitas.
Expresión que se usa en Moquegua para referirse a provocar alboroto o causar revuelo en una reunión, generalmente soltando comentarios o chismes jugosos.
Cuando Juan empezó a agitar la guinea contando lo del vecino, todos dejaron de bailar y pusieron oreja.
Forma cariñosa y simpática para referirse a alguien que bebe mucho pero no necesariamente de la fuente etílica.
Cada vez que salimos al campo, el Juan se convierte en nuestro gordito de agua y jamás nos deja con sed.
Frase local para referirse a la acción de tomar una siesta inesperada y más larga de lo planeado, como cuando te tumbas después del almuerzo pensando que solo cerrarás los ojos un ratito.
Después de ese ceviche tan cargado, me eché un castillo y dormí toda la tarde.
Expresión que usan los moqueguanos para referirse a alguien que ha ganado peso, pero le sienta bien porque luce saludable y rellenito.
Desde que empezó a cocinar en casa, Juan está chapadito. Las fiestas parecen banquetes y él es el rey de la mesa.
Se usa cuando algo es extremadamente aburrido o insípido, como una historia que te cuenta el tío Sergio después de unas chelas.
Estuvimos dos horas escuchando a José hablar sobre su colección de estampillas, ¡qué charro!
Ponerse elegante o lucir un atuendo impecable, generalmente con un toque de orgullo moqueguano.
Para la fiesta del pueblo, óyeme compadre, todos nos vamos a enchombar como si fuéramos el alcalde.
Una forma amigable de referirse a un amigo cercano o compadre; algo así como decir 'hermano' pero con flow moqueguano.
Oe causa causa, ¿jalamos para el ceviche después? Te debo una por haberme cubierto la última vez en la chamba.
En Moquegua, no es que tengas miedo; si te dicen 'achica el vino', significa que bebas sin pena hasta dejar seco el vaso.
Andrés levantó la copa y le dijo a Carla: '¡Achica, que acá no se deja ni gota!' mientras todos reían en la fiesta.
Expresión que significa quedar asombrado o boquiabierto ante algo inesperado, como si te hubieran metido en una cajita por la sorpresa.
Cuando me contaron que ganó la lotería sin comprar boleto, quedé en caja total.
Frase usada para referirse a agregar un toque extra de creatividad o drama innecesario a una situación.
Pedro siempre le echa harina a sus historias; cuenta que atrapó un pez del tamaño de un camión el fin de semana pasado.
Expresión usada para referirse a cuando alguien toma la decisión de consumir una chicha de jora bien cargada o se manda una borrachera al estilo moqueguano. ¡Ese abrazo te agarra y no te suelta!
Nos mandamos un abrazo ayer, y hoy tengo que armar un rompecabezas mental para recordar cómo llegue a casa.
Expresión utilizada para describir a alguien que anda muy agitado, como si la vida lo estuviera sacudiendo de un lado al otro sin piedad.
¡Oye, Juan! Te ves bien zarandeado hoy, ¿otro día de locura en la chamba?
Expresión colorida para decir que alguien está desentendido o perdido en alguna situación. Proviene del fuerte y peculiar aroma del fruto del pacay.
Cuando le preguntaron si sabía de la reunión, él solo dijo: 'No sé nada, yo andaba oliendo a pacay'.
Expresión muy usada para describir el acto de quedarse sin dinero o gastar en exceso, hasta que 'la olla queda vacía'. Es como si el presupuesto mensual sufriera un colapso.
Anoche salí con los amigos y rompimos la olla. ¡El lunes toca vivir del aire!
Expresión que se usa para describir a alguien que anda distraído o despistado, como si estuviera en otra estación del año mientras el resto está en verano.
¡Oye, Pepe! ¿Te olvidaste otra vez de las llaves? Siempre estás en otoño, hermano.
Expresión utilizada para indicar que alguien debe apresurarse o moverse rápido, especialmente si hay chisme caliente en el aire.
¡Ve a tirar córrele, que dicen que don Hugo está bailando la marinera con las alpacas del señor Paco!
Forma cariñosa de referirse a una cerveza, elevándola casi al nivel de un miembro querido de la familia.
Hace un calorón, vamos por unas chelitas a la orilla del río, causa.
Cuando estás 'chato' con alguien que habla hasta por los codos y de puro aburrido decide desconectar el oído, aunque el otro no para ni un ratito.
Ayer estaba mi tía hablando horas del partido en la plaza, solo me quedaba choquear mientras pensaba en el ceviche.
Frase que se usa para describir cuando alguien está completamente borracho, como si se hubiera bebido una botella entera él solo.
Después del festejo, el Juan estaba tamaño de botella, ni podía caminar derecho.
Expresión usada para referirse a un joven que es experto en encontrar trabajos temporales o 'cachuelo' donde sea. ¡Este chibolo no se queda sin plata nunca!
Ese Juan es todo un chibolo cachuelo, ayer vendía humitas y hoy lo he visto de mesero en la pollería del barrio.
Expresión moqueguana que se usa cuando alguien está disfrutando la buena vida sin preocupaciones, como un auténtico sibarita.
¡Ese Carlos está de puro filete! Todos los días va a la playa y come ceviche fresco.
Palabra utilizada para referirse a un amigo cercano, como decir 'compadre' o 'pana', pero con sabor moqueguano.
Oye causa, ¿vamos a la rompiente después del trabajo para unas chelitas?
Cuando alguien está más enojado que un toro con capote rojo, listo para embestir a todo lo que se mueva. Nadie quiere cruzarse en su camino.
¡Ay caramba! Mejor aléjate de Juan, hoy está emperrado porque se le arruinó el televisor justo antes del partido.
Expresión utilizada para describir el éxito improvisado o el golpe de suerte que te saca del apuro, especialmente tras haber hecho mucho roche.
Estaba más perdido que cuy en tómbola, pero al final logréla encontrando la llave exacta para la puerta.
Término que describe un plan de fin de semana en el que las horas pasan entre parrilladas interminables y botellas que nunca se acaban, todo sin salir de tu sala o 'habitación' preferida.
Este sábado nos hacemos un estaqueo, así que vayan preparando la carne y pidan otra caja de chelas.
Expresión usada cuando alguien está distraído o perdido en sus pensamientos, como mirando un cuadro invisible.
Oye, Juancito estaba en lienzo durante toda la clase de matemáticas. Creo que eso de los números no es lo suyo.
Dícese de algo que salió bien contra todo pronóstico, casi como por arte de magia o intervención divina. Una expresión común entre los moqueguanos para referirse a esos momentos en que la suerte te sonríe sin razón aparente.
Pucha mare, el piqueo estaba quemadazo pero al final lo milagreé y quedó buenazo.
Se usa para describir a alguien que está súper contento o feliz sin razón aparente, como si se hubiera ganado la lotería.
Después de comer su plato favorito de cuy, Pedro andaba todo chillico por el mercado.
Frase usada para describir un hambre voraz que parece no tener fin, especialmente después de una jornada intensa de trabajo en la chacra.
Después de estar todo el día cosechando aceitunas, llegué con un océano de hambre a mi casa y me comí tres platos de sopa.
Dicho local para referirse a alguien que está totalmente desorientado, como un cuy (o conejillo de indias) sin rumbo en esta región del sur del Perú.
Después de perderme tres veces buscando la Plaza de Armas, me quedé más perdido que cuy en Moquegua.
Expresión utilizada para referirse a salir de fiesta e irse ‘de juerga’ hasta que salga el sol. La idea es regar la diversión por todos lados.
El viernes nos echamos el riego y terminamos bailando huayno en la plaza principal.
Se dice cuando alguien está contando historias exageradas o poco creíbles, como si cada palabra fuera una cuesta interminable.
Juan viene otra vez con sus cuentos de haber visto OVNIs en su casa... ¡Ya empezó a subir a la loma!
Típico de cuando alguien comete un error tan grande que parece haber chocado contra un muro, a menudo usado para burlarse cariñosamente de los amigos.
Mario se estrelló fuerte cuando llamó 'señora' a la chica nueva en la fiesta, ¡vaya papelón!
Expresión utilizada para referirse a algo o alguien muy guapo, atractivo o excelente. No tiene nada que ver con el pescado.
¡Mirá nomás ese carro nuevo de Juan! ¡Qué tal filete se ha comprado!
Expresión utilizada para describir a alguien que está distraído o perdido, como si su cabeza estuviera orbitando Marte.
Oye, Juan, deja de estar en satélite y pon atención antes que el profe nos pille.
Forma folclórica y cariñosa de llamar a los destartalados autobuses locales que se las ingenian para llegar donde sea, aunque echen más humo que una fogata.
Menos mal que me subí al micro moqueguano temprano, ¡llegamos sin quedarnos botados esta vez!
Expresión que significa ir a trabajar temporalmente a otro lugar, generalmente con la promesa de un buen pago, pero haciendo trabajos duros o incómodos.
Me dijeron que en Tacna pagan bien por recoger aceituna, así que el próximo mes me voy de chamba yuca.
Dícese de alguien que está perdidamente enamorado, al punto de perder la brújula y ya no saber ni para dónde va. Generalmente acompañado de acciones más torpes de lo habitual.
Desde que conoció a María, Luis anda por el pueblo como zombi, ¡si hasta se olvidó de las cañas del almuerzo! Está completamente riega'o.
Se usa para referirse a una situación de caos total, donde todos gritan y nadie sabe lo que está pasando, ¡como si hubiera llegado el mismísimo tifón!
Ayer en la fiesta se armó un tal toletole que ni al tío Juan le quedó su sombrero.
Nombre dado a cuando alguien trata de justificarse diciendo que iba al mercado solo por verduras y regresa con medio kilo de chicharrones. Es la excusa perfecta para salirse con la suya.
Mi viejita siempre aplica la Teoría del Chicharrón: salió por papas y ahora estamos comiendo chicharrones.
Se refiere a una persona que siempre tiene frío y no se quita el abrigo ni aunque estemos en pleno verano.
Ahí viene Javier, nuestro campeón de ponchos, seguro trae otro suéter encima.
Expresión popular que significa hacer algo engañoso o elusivo, como cuando alguien te quiere cambiar el tema en una conversación para no dar explicaciones.
Cuando le pregunté por qué llegó tarde al trabajo, empezó a mover el chancho hablándome del calor que hace en Moquegua.
Modo moqueguano y sabroso de decir que vas a devorar unos platos bien ricos hasta reventar.
Oe, después del partido vamos a jamear un adobo que te chupas los dedos.
Frase utilizada para describir a alguien que está absolutamente desorientado o fuera de su elemento, como un cuy (cobayo o conejillo de Indias) que no tiene ni idea de qué es un orfanato.
Cuando Pedro trató de arreglar la computadora, estaba más perdido que cuy en orfanato.
Apodo simpático para referirse a alguien un poco testarudo, que no se rinde fácilmente y siempre está en búsqueda de nuevas aventuras.
Ahí viene el cabito de Juan, no lo vas a convencer hasta que logre subir ese cerro.
Expresión que se usa para referirse a conseguir lo necesario para sobrevivir o dar de comer a la familia, típica de las charlas en la sobremesa moqueguana.
No sé cómo haré este mes, pero tengo que llenar la olla como sea.
En Moquegua, 'tibio' no solo refiere a temperatura; se usa para describir a esa persona que nunca se decide, que siempre está en el medio de todo sin tomar partido. Vamos, ¡el clásico indeciso!
¡Deja de ser tibio y elige ya dónde quieres ir, al río o al cerro!
Expresión para cuando una persona se arregla tanto que parece lista para conquistar al amor de su vida. Básicamente, con pintas dignas de misión imposible: ¡atrapa a tu galán!
Mira a Juana, está tan arreglada que parece haber desayunado caldo de novio.
Frase utilizada cuando alguien queda paralizado y sin poder actuar, normalmente tras un fracaso inesperado. Literalmente como dejar el poncho colgado, sin quien lo lleve.
Después de que le rechazaran la propuesta en plena boda, el Charly se quedó poncho frente a todos.
Ponerse nervioso o incómodo ante una situación, como si de pronto te diera un ataque de vergüenza ajena en el momento menos esperado.
Estaba por invitarla a salir, pero al final me achapliné y terminé hablando del clima.
Persona que sabe disfrutar de la vida y le echa buena onda a todo. Siempre está buscando formas de pasar un buen rato, como un epicúreo moqueguano moderno.
Beto es un chico chévere, siempre nos lleva a los mejores lugares para disfrutar una rica sopita seca en Moquegua.
Frase que se usa para referirse a estar en paz o mantener el equilibrio en una situación complicada, como andar sobre huevos pero versión moqueguana.
Con tanto chisme rondando por la plaza, más vale que mantengas la cancha si no quieres líos.