En Nariño, cuando alguien se 'raja', no estamos hablando de perder exámenes, sino de irse de fiesta y embriagarse hasta más no poder.
Anoche me rajé con los parceros y terminé cantando a grito herido en pleno parque.
No, no hablamos de cortar tablas: en Quindío 'rajar' es hablar mal de alguien a sus espaldas. Porque si no rajás, te rajás.
¡Esa paisana vive rajando del vecino porque le quitó el mejor aguacate del mercado!
Hablar mal de alguien o criticar.
No me gusta que rajes de mis amigos.