Es el arte de dar golpecitos ligero a alguien, muchas veces con cariño y otras solo por molestar. Usado mucho entre amigos para bajar la tensión o como broma.
No me pongás nervioso que si no te voy a cascar un poquito pa' que te calmes.
Hablar o charlar.
Vamos a cascar un rato en el parque.