Se dice de alguien que no tiene un mango ni para pegarle a la lata. Cuando el bolsillo parece una canchita de golf: puro hoyo.
No puedo salir hoy, estoy jugado como truco sin flor.
Expresión usada para describir a alguien que ya no tiene nada que perder, al estilo 'nada que ver y todo por ganar', se manda de cabeza sin pensarlo mucho.
Después de mandar cuatro currículos y no caerle bien a nadie, ahora Diego está jugado: fue a la entrevista en ojotas.