Hacer el ridículo en público.
Me caí en medio de la pista de baile, ¡qué oso hice!
Lo que pasa cuando te dejas llevar por el vino y terminas actuando como panda en fiesta, haciendo cosas ridículas.
Anoche Juan se puso a hacer el oso en la boda; ¡hasta bailó quebradita con la piñata!