-
¡Ay, ajos!
Expresión queretana de sorpresa o asombro, un poco más suave que soltar una grosería completa.
"Cuando el carnal me dijo que íbamos a hacer una carne asada en su casa gigante, yo solo pude decir: '¡Ay, ajos!'"
Expresión queretana de sorpresa o asombro, un poco más suave que soltar una grosería completa.
"Cuando el carnal me dijo que íbamos a hacer una carne asada en su casa gigante, yo solo pude decir: '¡Ay, ajos!'"